¡Hora de Ponerse los Pantalones!
Empieza semana y se vislumbra en la oficina un aire de incertidumbre, suena más de tres veces el teléfono y nadie lo atiende. ¿Qué sucede? El empleado al que le correspondía contestarlo no llegó a trabajar, simple y descaradamente abandona el trabajo sin ninguna explicación. No hay ninguna ley que favorezca al empleador que le otorgue el derecho a tomar...