Tuvimos que adaptarnos a un modelo de trabajo, que en un principio era algo opcional en las empresas, pero a raíz de la pandemia se convirtió en la opción de continuidad y fue el Teletrabajo y otras empresas orientaron su gestión a la figura de Trabajo en Casa.
Para para muchos se convirtió en la oportunidad de estar más tiempo con sus familias y alternar su tiempo de trabajo con los quehaceres diarios y pronto se pusieron de moda las video reuniones en las que, según creíamos se podía controlar los procesos, especialmente administrativos, desde casa.
Al mismo tiempo muchas empresas a pesar de la situación, tuvieron que continuar con su gestión operativa, sectores económicos como transportes, alimentos, servicios, salud, tuvieron que acoplarse a las medidas y establecer estrategias de para prevenir el contagio, de esta manera nació un concepto novedoso de generar prevención, conocido como los protocolos de bioseguridad, los cuales se extendieron en todas las actividades económicas y ahora son parte de los procesos de prevención aplicados en las empresas.
Y de esta manera durante este año hemos podido, de alguna manera sobrevivir, pero ya estamos en el 2021 y nacen más interrogantes que soluciones:
¿Que va a pasar con la economía en el 2021?
¿Cuál será el proceso de reactivación para las empresas?
¿Volverá a ser todo como antes?
Estas y otras dudas mas no solo acaparan la atención de los Gobiernos (Nacional y Locales), de los gremios, los empresarios (grandes, medianos y pequeños) y claro los trabajadores, tanto dependientes como independientes. Surge entonces la pregunta esperada en materia laboral , ¿qué va a pasar con el Sistema de Gestión de Seguridad y Salud en el Trabajo?, actividad que todas las empresas empezaron a implementar desde el 2015.
El SGSST, y todas las normas que han sido emitidas antes y durante la pandemia están vigentes y es poco probable que sean modificadas en el corto plazo, es decir que los aspectos legales que amparan la prevención en Colombia seguirán siendo la referencia para la protección de los trabajadores; pero al interior de las empresas teniendo en cuenta la planeación establecida, deben estar reportando las autoevaluaciones a las ARL y al Ministerio.
Así mismo en muchas empresas, donde muchos cargos fueron eliminados y/o reestructurados, estas tendrían que modificar y actualizar el SGSST para los nuevos retos que afrontarán, estos son algunos de ellos:
- Identificación y valoración de riesgos. En la Matriz de identificación de peligros y valoración de riesgos, ahora debe incluir el factor de bioseguridad asociados con virus pues hasta que no contemos con una vacuna que pueda contrarrestar este elemento, puede continuar afectando a la población. En este mismo orden, también debe incluir como lugares de trabajo, las modalidades generadas en teletrabajo y/o trabajo en casa.
- Matriz legal. Como consecuencia de todas las medidas que los gobiernos han tenido que recurrir, la herramienta empleada es la expedición de decretos, resoluciones, circulares, etc. esto conlleva a la revisión permanente de los documentos que afecten tanto generales como especificas al tipo de actividad económica de cada empresa.
- Plan de emergencias. Este documento no solo debe limitarse a la atención de situaciones como incendios, sismos, robos, también de incluir escenarios de pandemia, pues será una nueva condición, que como cualquier emergencia, la empresa debe tener contingencias estudiadas e implementadas, en caso que se prolongue más tiempo la pandemia o en un futuro se presente otra.
- Reporte de eventos, especialmente enfermedades. En este nuevo ambiente generado por el virus, el proceso de reporte, debe ser efectivo y dinámico a efectos de que se puedan tomar las medidas a tiempo, esto debe crear en las empresas una cultura seria no solo del reporte, también de las acciones subsiguientes a la generación del evento.
- Plan de Trabajo y Programa de Capacitación. Siendo estos dos de los documentos clave que las empresas deben evidenciar en las respectivas auditorias, en ellos es necesario plasmar toda la información y actividades pertinentes a la prevención de los riesgos, ahora incluyendo los contagios por virus.
- Indicadores y Auditorias. Deben incluir las acciones que la empresa ha implementado como parte activa en el control de enfermedades y accidentes laborales, hay que sumar los protocolos de bioseguridad implementados.
De esta manera es muy importante, tener en cuenta que la prevención ha dejado de ser un tema particular a la empresa o su actividad económica y debido a la situación de pandemia, es un tema trazable a toda la sociedad.