Empezamos el 2018 con los mismos paradigmas del año pasado, pereza al lunes porque empieza el trabajo y pereza el viernes porque termina la semana; son solo cinco días laborares y muchos empleados se quejan de la rutina y del ritmo laboral, pero lo que no saben es que el 2018 es la entrada a la era digital, y con la inteligencia artificial pueden ser reemplazados por una máquina que logra hacer su trabajo sin pereza, con eficiencia y a menores costos.
Ya las grandes cadenas de supermercados hacen descuentos extraordinarios si compras por internet y si lo haces en la tienda física no hay descuento y el precio del producto es más costoso. Todo esto porque el Software reemplaza las personas y el empresario ahorra dinero en nómina, comisiones, renta de locales y demás gastos que terminan beneficiando al usuario final. Pero ¿esto es bueno para las personas? ¿qué consecuencias trae la inteligencia artificial a la gente del común y a las que no valoran su trabajo? Estas más que preguntas son reflexiones para los trabajadores que no solamente deben ser eficientes y comprometidos, sino que también deben estar actualizados en un mundo de tecnología cada vez más veloz.
La inteligencia artificial unida a los dispositivos móviles y a la oficina virtual se convierte en la principal amenaza del trabajador. Entramos a una nueva era donde compite la inteligencia artificial con la inteligencia humana, esta es la razón por la cual las personas tendremos que demostrar que nuestra inteligencia es superior a cualquier maquina y que estaremos en la capacidad de operar las máquinas y manejar la tecnología. El poder de nuestra inteligencia es ilimitado pues somos hechos a imagen y semejanza de Dios, capaces de controlar toda clase de tecnología, más sin embargo para potencializar esas habilidades es necesario empezar a capacitarse y a entender la tecnología trabajando de la mano con ella.
Somos nosotros -los humanos- mucho más inteligentes y tendremos que demostrarlo, manejando la tecnología y no dejando que ella nos maneje.
Podemos demostrar con nuestro cerebro desarrollado que la tecnología sin nuestra inteligencia no funciona; pero si los avances nos permiten hacer mejor el trabajo, podremos hacer una labor en equipo donde estas dos inteligencias se fusionen y se logre un resultado extraordinario.
La inteligencia artificial jamás tendrá sentimientos, ni se cansará o tendrá antivalores y esa será una desventaja para los seres humanos que están acostumbrados a quejarse, a no medírsele a todas las actividades y a ver el trabajo como un deber y no como un placer. Es hora de empezar a ser personas inteligentes con capacidades extraordinarias para que la tecnología sea un apoyo que nos permita hacer un trabajo eficiente y más descansado.
En el 2018 o avanzas… o serás reemplazado ¿que deseas hacer?
Vicky Rodríguez
Directora
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