La globalización ha transformado de manera profunda y progresiva a la sociedad, consolidando una red de comunicaciones global. Ante este escenario, y los nuevos retos que han surgido en materia de tecnología, se ha logrado interconectar los saberes a partir de las pantallas. Desde la última década, la sociedad ha integrado las pantallas como apoyo o recurso para el desarrollo de sus actividades.
A partir de este concepto, según la Real Academia Española, el término multipantalla es definido como un dispositivo electrónico (notebook, tablet o smartphone) que un usuario utiliza para interactuar con el contenido que está consumiendo. Un estudio realizado por Cisco CNI indicó que cada colombiano usa al menos cuatro dispositivos móviles, y simultáneamente, el 40% de la población utiliza diferentes pantallas; ya sean tablets, PC, televisor o celular.
Este comportamiento permite que cada persona acceda a una cantidad inimaginable de información, logrando conectarse para interactuar con una red de contactos alrededor del mundo. Además de la interacción que se produce a través de estos medios, algunos expertos se han enfocado en el consumo y el uso diario de estas herramientas como medios de entretenimiento en el desarrollo de su jornada.
Un país «multitasking»
La manera como los usuarios han venido apropiándose de estas tecnologías se puede ver materializada en el desarrollo de sus actividades. Luego de un estudio realizado por Google, se concluyó que el 86% de los colombianos dicen tener la capacidad de «multitask», es decir, la habilidad de realizar dos o más tareas de manera simultánea. El ejemplo más claro de ello es ver televisión a la vez que se usan tabletas o se revisan redes sociales por medio de sus teléfonos inteligentes.
Dicho comportamiento ha desarrollado más habilidades dentro del espacio laboral, además este estudio señala que el 16% de la población colombiana usa pantallas complementarias para desarrollar varias tareas, simplificando el tiempo y agilizando su agenda. Es tan interesante como por ejemplo, pedir un Uber directamente desde el celular, mientras se navega en Internet en el computador y se ve televisión.
Colombia ha logrado posicionarse como uno de los países líderes en la región materia de multipantalla, pues según un estudio de Millard Brown, Colombia es el tercer país con más consumo multipantalla: un colombiano, entre 16 y 45 años, tiene acceso a TV y smartphone y consume aproximadamente cuatro horas de video al día. Esta oportunidad ha abierto al país a explorar en tecnologías digitales, y, además, ha logrado que diferentes empresas logren su cometido en términos de publicidad y difusión de información.
Como los usuarios, las empresas han logrado acoplarse a esta nueva ola de tecnologías, pues a partir de estos dispositivos y las redes sociales que utiliza cada usuario, las empresas han logrado identificarlo a partir de sus gustos, monitoreando sus actividades. A partir de allí, las empresas han destinado sus esfuerzos en crear un plan estratégico fundamentado en el consumo de información, replanteando la manera de visibilizar sus productos por medio de diferentes canales o múltiples pantallas.
Dicha estrategia tuvo tal acogida que el reciente Youth Insight Report arrojó que el 85% de los jóvenes compra de manera online al menos una vez al mes, dinámica que ha traído consigo nuevos usuarios y consumidores, pero además, mayores ingresos para las compañías. Gracias a la injerencia de las nuevas tecnologías digitales a la industria, en el mercado se ha fomentado un ecosistema de competitividad, lo que genera que las empresas destinen más esfuerzos y recursos para ofrecer la demanda perfecta a cada consumidor.
Proyección de una economía digital en el 2025
La injerencia de las multipantallas ha supuesto un cambio en la agenda TIC de los gobiernos de la región, sobre cómo estas pueden ser un incentivo para el desarrollo de nuevas iniciativas o herramientas que mejoren los procesos de las organizaciones, e incluso, que sean posibles soluciones a problemas de cualquier ciudadano. Lo anterior, con el propósito de que los proyectos que surjan contribuyan al desarrollo sostenible del país.
Para el caso colombiano, el MinTIC, de la mano con HugBog, lograron alinearse para poder impulsar a diferentes empresas colombianas a incursionar en el mercado de la tecnología. Para el año 2013, se realizó uno de los eventos más importantes en esta materia, logrando que 10 empresas presentaran ante más de 20 inversionistas sus desarrollos innovadores de aplicaciones y plataformas web. En este tipo de espacios, no sólo se consigue la apropiación de las tecnologías de información por medio de aplicaciones, sino, además, evidenciar cómo estas funcionan gracias a diferentes canales o multipantallas que en últimas crean una cadena de valor al usuario, a la empresa en sí y a la economía.
Estas iniciativas han permitido al país enrutarse hacia una economía liderada por la tecnología, y a su vez, proyectarse como economía digital en el 2025. Para poder lograrlo es necesario trabajar en dos frentes: el primero de ellos es la inmersión de múltiples sectores a la ola de la tecnología como la educación, salud y el sector financiero, y el segundo frente es cumplir con las proyecciones en materia de inversión, pue según el DNP: «para que el país logre ser una economía digital en el 2030, es necesaria una inversión aproximada a los $94 billones, específicamente en el sector de infraestructura».