Dentro de las líneas de crédito de consumo del sector financiero colombiano, se destaca la línea de crédito de libranza, durante el periodo 2016-2020 creció al 45% frente a los saldos de cartera presentados a cierre de 2015 y su participación es hoy de $61.987 billones, lo que equivale a un 38,2% del total de la cartera de consumo, cifra alcanzada en lo corrido del 2021, seguido por el crédito de libre inversión que se ubica en el 30,9%. Cifras tomadas de la Superintendencia Financiera de Colombia y posteriormente consolidadas, a corte agosto 2021.
De acuerdo a lo anterior, para el cliente que adquiere un crédito de libranza representa la oportunidad de acceder a una tasa de interés baja, plazos desde seis (6) hasta ciento ochenta (180) meses, montos desde un (1) millón hasta el máximo que permita su capacidad salarial, estas características hacen que el crédito de libranza sea la mejor opción cuando se trata de aliviar su flujo de caja y realizar compras de cartera para mejorar las condiciones financieras (tasa, valor de cuota) de las deudas actuales, usarlos simplemente como libre destino o desarrollar cualquier proyecto que se tenga. Por otra parte, en nuestra “nueva realidad”, el no tener que realizar una visita presencial a la entidad para realizar el pago, genera un plus para el cliente, además de la posibilidad de ahorrarme el 4*1000 cuando debo trasladar los recursos de una entidad a otra para responder por mí crédito.
Hoy por hoy las organizaciones empresariales están llamadas a velar por la estabilidad económica de sus colaboradores, en lo posible deben facilitar los espacios que permitan a su equipo humano conocer tips y consejos de salud financiera, como también conocer las posibilidades que ofrece el mercado para tomar mejores decisiones en cuanto a adquisición de créditos se refiere.
Para estas últimas y para las entidades que manejan nóminas de pensionados, es también la posibilidad de favorecer la libre competencia, esto significa registrar en su nómina múltiples posibilidades de crédito, representada cada una en las diferentes entidades que hoy son operadores de libranza (Entidades Financieras, SAS, Cooperativas, Agremiaciones de Empleados, entre otros, definidos así por la ley 1527 de 2012, ley de libranza). Abrir espacios para que su equipo humano, pensionados, jubilados y beneficiarios de pensión puedan acceder a créditos con condiciones preferenciales en relación al descuento a través de la nómina.
Adicionalmente el papel de aquel que dirige la nómina o pagador es relevante desde el punto de vista de los datos que puede socializar con la entidad al inicio de la relación. Datos tales como: antigüedad promedio de los colaboradores, nivel salarial, ingresos fijos sujetos a liquidación prestacional, son relevantes para un buen análisis de las políticas de crédito a regir, aunque esto último es muchas veces pasado por desapercibido, sí determina el futuro de la relación comercial empleador-entidad de libranza a mediano y largo plazo, pues definirá cualquier cambio en las políticas de crédito y ofrecimiento del mismo, empezando por las condiciones de los préstamos, EJ: tasa, plazo y perfil de cliente.
Lo anterior debe pensarse desde el intercambio periódico de información de cada parte que es el centro de la relación comercial entre los dos mencionados. Información que finalmente permite al cliente llevar control sobre el comportamiento de su crédito.
¿Ahora bien, que debemos revisar y comparar como clientes antes de tomar un crédito de libranza?
¿Cómo cliente conozco mí perfil de crédito?, es decir, ¿existe experiencia crediticia? ¿las obligaciones de crédito se encuentran al día en pagos?, nace aquí el ofrecimiento que se realice o que busque, el crédito y sus condiciones estarán sujetas en parte a las respuestas a estas preguntas, luego si revisamos:
Valor de la cuota por millón, y si esta está compuesta de capital+intereses+ seguro vida deudor (que cubre el valor del crédito en caso de fallecimiento o incapacidad, valor que varía según la entidad), si existe a esta suma algún otro rubro posible que normalmente lo determina el perfil de riesgo ej: Aval, fianza., y sobre todo debemos consultar cuales son los descuentos que se me realizan en el momento del desembolso así como conocer el proceso de cancelación de la deuda y los posibles cobros a realizar en ese momento por parte de la entidad.
En resumen, no simplemente se trata de comparar una tasa de interés, ni con qué tipo de entidad voy a adquirir el crédito, debemos entonces comparar todos los costos asociados, además del plazo al que voy a pagar.
Por otra parte, es importante mencionar que las entidades financieras vienen flexibilizando sus políticas en cuanto a perfil de cliente, con el fin de admitir reportes negativos en centrales de riesgo, reportes que por monto o tiempo transcurrido me permiten crear un perfil de cliente que no se venía manejando hace unos años pro este sector, en contraste con el menor riesgo que tradicionalmente ha mostrado el producto.
Libranza, es pues una posibilidad de financiación para todo aquel que devengue un salario, pensión o ingreso por nomina en general, un crédito ajustado casi a todo perfil de cliente, edades y nivel de ingresos.
Lo que viene para Libranza conservando su dinamismo y adaptación a las nuevas necesidades, es su integración con otros productos financieros tradicionales, es decir veremos nuevos productos derivados de Libranza en el corto y mediano plazo.
Alvaro qué buen articulo!! . Has descrito de manera sencilla y contuntende el producto de Libranza.
Hacer que lo complejo sea entendible y ponerlo al alcance de todos es sin duda la labor que Giros y finanzas en cabeza Tuya están haciendo con la Libranza.
Felicitaciones !!