El cambio generacional y el avance de la tecnología está poniendo de manifiesto la necesidad de un cambio cultural y organizativo en las empresas. Findasense ha creado una nueva cultura laboral que involucra más a sus empleados sin la necesidad de jefes que apliquen control.
Según Rafael Tamames, socio fundador de Findasense “EPIC es el nombre de esta cultura, el ADN de lo queremos ser y hacer. Sus iniciales significan: Estrategia, Propósito, Identidad y Cultura. Y estamos en el proceso de transmitir en toda la organización esta estrategia de transformación basado en 6 pilares: Propósito, Transparencia, Co-creación, Autogestión, Maestría, y Plenitud».
Sin jefes, nueva cultura laboral
José Ramón López Grañeda, Global Company Lead de Findasense destaca que “el objetivo es formar equipos autogestionados y convertirse en una organización responsiva, y hacer que las relaciones funcionen, pero no solo con las marcas con las que trabajamos y sus consumidores, sino también con nuestros partners y sobre todo con nuestros empleados. Nuestra referencia es convertirnos en una organización TEAL, que busca desarrollar al máximo el potencial humano, y en la que en el centro están las personas”.
Esta iniciativa surge como respuesta al entorno organizacional actual denominado VICA (volátil, incierto, complejo, ambiguo). Y consiste en un modelo propio creado pero inspirado en autores y otras metodologías como: DRIVE de Daniel Pink, TEAL de Frederic Laloux, HOLACRACY de Brian Robertson y en colaboración directa con el modelo NER de Koldo Saratxaga. Todos ellos convergen en la importancia de transformar los modelos organizacionales y la cultura corporativa hacia una centrado en las personas.
Laura Di Prisco, Global Culture & People Happiness Lead destaca “En este último año, hemos trabajado intensamente en España, en un proyecto piloto de transformación cultural junto la colaboración de K2K Emocionando para desarrollar un sistema de decisiones colectivo y horizontal en el que los empleados participan en la decisión de aspectos clave de la compañía. Queremos dejar de pensar solo en el beneficio económico para comenzar a pensar en el propósito de la organización, pasar de las jerarquías a redes de colaboración o equipos autogestionados, pasar de la privacidad y opacidad de la información a la plena transparencia, eliminar los mecanismos de control para empoderar a las personas en la toma decisiones, de los privilegios para algunos pocos a la equidad de condiciones para todos”.